La verdad sobre el sexo en el trabajo
La mayoría de las personas lo han practicado.
La última encuesta de este tipo, realizada por el sitio web Business Insider a más de 2.500 personas, arroja algunos resultados novedosos, como que solo uno de cada diez se arrepiente de su desliz sexual o que el 84,5% ha fantaseado con alguno de sus compañeros o jefes.
Con pareja, casados o solteros, el roce hace el cariño, y cuando se convive durante ocho horas diariamente, es frecuente que este roce se acabe convirtiendo en sexo. De ahí, que las infidelidades más comunes se cometan con compañeros de oficina, principalmente, en aquellos trabajos "donde hay más posibilidades de convivir y establecer relaciones", explica Miren Larrazábal, presidenta de la Federación Española de Sociedades de Sexología (FESS) y directora del Instituto Kaplan de Psicología y Sexología.
Los únicos límites que se ponen al sexo en el trabajo tienen que ver con las jerarquías. El 65% desaprueba estas relaciones cuando se producen entre jefes y subordinados.
Una situación atípica según los participantes en la encuesta, pues solo el 17% de los que reconocieron haber mantenido relaciones en el trabajo, las tuvieron con sus superiores. Sin embargo, este dato contrasta con las respuestas de los trabajadores que ocupan puestos de dirección, pues el 35,5% asegura haber tenido alguna relación con los subordinados.